El colador es uno de los utensilios imprescindibles en la cocina, tanto a nivel doméstico como profesional. Y es que, ¿quién no tiene uno en casa? Hoy hablamos de los más básicos: los coladores chinos.
El colador chino es un colador cónico muy eficaz para filtrar caldos, cremas, salsas o sopas separando las partes sólidas, como por ejemplo, el gazpacho o la vichyssoise. Gracias a sus finísimos agujeros, por los que debe pasar el líquido o puré, elimina los grumos y consigue texturas finas, suaves y delicadas.
El origen de este nombre puede deberse a la forma que tiene: muy similar a la de un sombrero chino. Este tipo de colador suele ir acompañado un utensilio ideal para ayudar a hacer pasar el puré que se quiere colar. Es similar a una mano de mortero de madera pero en forma cónica que se inserta en el interior del chino, dándole vueltas y presionando en las paredes del colador. De esta manera, se aprovecha hasta la última gota del líquido.
En Lacor disponemos de muchos modelos fabricados en acero inoxidable, material que ofrece una excelente resistencia a la corrosión y a los ácidos alimentarios y sales; es liso, no poroso y muy higiénico, fácil de limpiar y no transmite sabores extraños a los alimentos.