A las puertas del fin de semana, os animamos a probar este cóctel sin alcohol que además de refrescante y saludable está riquísimo. Es una de las primeras recetas que nos trae Rocío, autora del blog VeggieBoogie. A los que aún no conocéis su blog os animamos a que lo hagáis, su afán por la gastronomía y la comida os va dejar boquiabiertos!
La piña colada es un clásico que nunca pasa de moda cuando empiezan a subir las temperaturas. Esta versión sin alcohol es perfecta para refrescarnos de una forma saludable en los largos días de verano que tenemos por delante y, además de estar deliciosa, las propiedades de los ingredientes utilizados nos van aportar diversos y excelentes beneficios para nuestra salud.
La piña es un potente digestivo natural. Además de poseer propiedades antiiflamatorias, diuréticas y antioxidantes, mejora la circulación y es ideal para adelgazar ya que nos ayudará a eliminar toxinas y a evitar la retención de líquidos.
La leche de coco orgánica (carne de coco madura triturada) es un delicioso sustituto de la leche de vaca, no contiene lactosa y es una increíble fuente de hidratos de carbono, proteínas, vitaminas y minerales. Protege nuestro cuerpo de infecciones y aunque posee un sabor bastante dulce su contenido en azúcares es muy bajo. El único inconveniente es el alto porcentaje en grasas saturadas que contiene por lo que se debe evitar su consumo diario, pero incluirla en nuestra dieta de manera moderada es altamente recomendable.
La menta es un potente descongestionante, facilita la digestión, nos ayuda a combatir el mal aliento y además es una fuente muy rica en antioxidantes, calcio, ácido fólico y vitamina A.
Las fresas y las frambuesas son poderosas antioxidantes, ricas en fibra, deliciosas y muy bajas en calorías. Si mezclamos todas estas maravillas en un mismo recipiente la mezcla no puede ser más que explosiva y deliciosa ¿No crees?
INGREDIENTES PARA 2 PERSONAS
- 1 piña orgánica mediana
- 250 ml de leche de coco bio
- 4-5 hojas de menta fresca
- 2-3 cucharadas de sirope de agave
- Un puñado de frambuesas y fresas silvestres
- Coco rallado
INSTRUCCIONES
- En primer lugar dejaremos todos nuestros ingredientes listos. Vamos a lavar cuidadosamente las frambuesas y las fresas (estas últimas las troceamos al gusto) y las metemos en el congelador al menos 30 minutos antes de preparar el zumo para que estén bien frías.
- Ahora cortaremos la piña en rodajas o en dados (yo he utilizado el cortador de piña de Lacor, super fácil y rapidísimo) y vamos a guardar la fruta troceada en el congelador junto a los frutos rojos.
- Pasado el tiempo necesario para enfriar bien nuestras frutas vamos a comenzar a elaborar el zumo.
- Sacamos la leche de coco de la nevera y disponemos todos nuestros ingredientes cerca. Encendemos la Slow Juicer y comenzamos a introducir los trozos de piña intercalándolos con chorritos de leche hasta que se acaben ambos ingredientes. Por último he pasado por el extractor 3 hojas de menta.
- Apagamos, agregamos en el recipiente con la mezcla 2-3 cucharadas de sirope de agave (en función del dulzor que nos guste), removemos bien y listo!
- A la hora de servir coloca previamente en la base del vaso un puñado generoso de frambuesas y fresas, vierte el zumo, decora con hojas de menta y espolvorea coco rallado. ¡Salud!
